Borrador I: Lectura

TALLER LITERARIO

La lectura es una rutina que se puede fomentar desde los primeros momentos de la vida de los más pequeños. 

  

Uno de los factores que facilitará que el niño adquiera el hábito lector es la manera en la que se le ofrece el contacto con el libro: hay que buscar que el niño esté receptivo a la lectura, que no lo vea como una obligación, etc. Que sea de su interés y adaptado a su edad. 

   

Un libro recomendable debe tener las siguientes características:

• El texto debe ser breve y claro para que el niño no pierda interés en la historia. 
• Una buena historia invita a la participación del niño o a que se identifique con los personajes o las situaciones.
• Un libro que juegue con el lenguaje, con repeticiones sencillas, rimas, onomatopeyas o palabras sonoras, ayuda a llamar la atención del pequeño. 
• Tanto las ilustraciones, como los materiales o el formato del libro también son importantes a la hora de elegir.
• Los colores vivos y los contrastes, así como las diferentes técnicas de ilustración ayudan a establecer un lazo de comunicación con el niño.

Respecto al libro elegido para hacer el taller es ‘La vaca que puso un huevo’ de Andy Cutbill. 

Lo escogí ya que me lo recomendó Irune y me llamo la atención el título y las imágenes que había en el interior.

Una vez leído en mi casa, observé que sería muy interesante dirigirlo a niños de 5-6 años porque creo que es un momento evolutivo muy importante para trabajar y desarrollar en ellos la identidad individual y su autoestima.
A esa edad les gustan los libros que traten sus emociones personales, porque empiezan a encontrarse con situaciones sociales diferentes, y este, fomenta la motivación de los niños.

Piaget en el estadio preoperacional, caracteriza al niño como animista, son capaces de identificarse en un animal u objeto.

La protagonista, la vaca Maca, está pasando por un momento evolutivo que pueden estar viviendo los niños a esas edades, ya que la vaca se caracteriza por tener un temperamento introvertido, baja autoestima y no estar segura de sí misma. 

Gracias a Maca, un niño puede descubrir que aunque no sepa hacer las mismas cosas que los demás puede ser feliz y disfrutar siendo lo que es.

Otra de las razones por la cual he escogido esa edad, es la estructura del cuento. Es lineal, una narración sencilla y apropiada para los niños de este período, ya que facilita la comprensión. Cuenta con un planteamiento, un nudo y un desenlace.

El libro además tiene un lenguaje cercano, exceptuando algunas palabras más complicadas como treta, patraña y embrollo, que por el contexto, el niño las puede entender.

También aparecen frases cortas y rimas, exclamaciones y onomatopeyas, lo que remarca el texto y hace que los niños mantengan la atención.

Es un libro de humor, que hace reír a los niños, disfrutan descubriendo un mundo en el que todo es posible, las vacas montan en bici, hacen equilibrios, etc.

De las tres estrategias que podíamos elegir, narración con libro, cuentacuentos y lectura, escogí esta última, ya que creo que es muy importante el desarrollo de la imaginación de los niños para que logren comprender, recrear y disfrutar de la historia de manera novedosa y diferente.

Cuando un adulto lee un libro, es como un mago que conoce un código secreto que le permite adentrarse en un mundo desconocido lleno de personajes y de historias. Los niños también desean conocer ese código para acceder a los mundos maravillosos que se esconden detrás de las letras.

Es fundamental que el niño escuche y entienda los cuentos que se les leen y que comparta con otros niños esa sensación de emoción, expectación, silencio y comprensión.

Creo que la lectura tiene verdadera consideración ya que ayuda al niño en su posterior conocimiento de la palabra escrita.

Asimismo debemos saber evitar la pérdida del deseo lector de los niños mediante un desarrollo atractivo, motivador y cercano del niño al aprendizaje lectoescritor.

Sobre la preparación del taller, me leí varias veces el libro para familiarizarme con él y preparé unas cuantas preguntas a modo introducción:

• ¿Qué veis en la portada?
• ¿No veis nada raro?
• ¿Las vacas ponen huevos?
• ¿Qué animales ponen huevos? ¿Y todos los huevos son iguales?

Tras este pequeño interrogante, procedí a leer el libro en tres grupos diferentes. Ya que en esta estrategia las imágenes no se deben mostrar, las enseñaba al final y a todas les encantaban las ilustraciones.

He de decir que la primera lectura fue la más floja ya que estaba nerviosa. Por este motivo la valoración de mis compañeras fue que debía leer más despacio y mirar más a los oyentes.

A medida que iba practicando fui cogiendo confianza, me iba sintiendo más cómoda con la estrategia escogida y con mi manera de llevarla a cabo.

En el segundo grupo esas criticas constructivas fueron disminuyendo, lo único, que a lo mejor debería mantener más el contacto visual.

Y finalmente, del tercer grupo no recuerdo ningún comentario para mejorar. Me dijeron que lo había hecho bien y que creían que a lo mejor debería enseñar las imágenes mientras leía el libro, pero como ya he explicado antes, veía más conveniente hacer la lectura y posteriormente mostrar las ilustraciones para el desarrollo de la imaginación.

Como cierre de la lectura, les cuestionaba aspectos del texto.

• ¿Os ha gustado el cuento?
• ¿Qué es lo que más os ha gustado?
• ¿Creéis que esto puede ocurrir de verdad?
• ¿Por qué creéis que las demás vacas tienen envidia a Maca?

Desde mi punto de vista, pude observar una mejoría gracias a las aportaciones de mis compañeras y a la repetición de la lectura en los diferentes grupos en los que trabajé, dando lugar a una interpretación mucho más cómoda y natural.

Proponiendo una actividad, opino que tras la lectura de este texto, los niños podrían pintar huevos cocidos con tempera de colores, imitando el huevo de Maca o pintándolo como más les guste en la hora de la asamblea para tratar, por ejemplo, el tema de la Pascua.

Me ha parecido una experiencia muy enriquecedora poder escuchar y narrar cuentos infantiles con las compañeras para aprender unas de las otras y utilizar las recomendaciones para mejorar nuestros conocimientos y pensamientos previos. 

Al principio, estaba un poco nerviosa por el tipo de público que iba a presenciar la lectura. Seguramente, estando frente a los niños, sea más sencillo. 

Esta actividad me ha servido para asentar los aspectos que hay que tener en cuenta para que la lectura sea correcta: entonación, ritmo, volumen, expresividad, pausas, interacción, leer despacio, claro y vocalizando ya que los niños solo cuentan con nuestras palabras. 

La lectura puede parecer algo sencillo a la hora de llevarlo a la práctica, pero tener que leer teniendo en cuenta todos los aspectos que he nombrado anteriormente no es nada sencillo.

Creo que a lo mejor me faltó más tiempo de preparación, pero aun así me siento compensada con los resultados, controlar los nervios y las miradas.

Respecto a la puesta en común con mis compañeras, he podido disfrutar de estupendas narraciones, cuentacuentos y lecturas, que seguro que me servirán de referencia en el día de mañana.

La verdad es que me he quedado con las ganas de escuchar a todas las demás.

FUENTES

Apuntes de literatura infantil

http://www.literaturasm.com/Pautas_para_elegir_lecturas_de_0_a_5_anos.html